Consejos de conservación de la leña

Antes de comprar leña en Cantabria tenemos que disponer de un espacio adecuado para su conservación. Un espacio que ha de reunir determinados requisitos que vemos en este nuevo post del blog.

Como ya comentamos en otras entradas, no todas las estufas y chimeneas precisan del mismo tipo de leña. Podemos encontrar leña de encina, olivo, almendro, roble, algarrobo, naranjo, etc. Por supuesto, unas arderán más rápido que otras. De todos modos, las pautas de conservación son comunes. En Carbones y Transportes Mencía te insistimos en que la leña tiene que estar lo más seca posible para que sea más sencillo encender el fuego y que se queme de forma más respetuosa con el medio ambiente. Si está húmeda, el calor de la chimenea eliminará esa humedad pero aumentando el consumo. Ten en cuenta que la leña absorbe el agua de la lluvia con rapidez y, si se guarda en sitios húmedos, terminará apareciendo moho y reduciéndose en consecuencia sus propiedades de combustión. Aunque el calor y el sol influyen en el proceso de secado, lo que realmente seca la leña es la ventilación y la circulación del aire.

Por lo tanto, en cuanto al almacenamiento, elige un lugar ventilado y protegido de la humedad. Lo ideal es que esté elevado del suelo y protegido de la lluvia y de la nieve. Hoy en día hay en el mercado estufas con modernas tecnologías de combustión y leña de muy buena calidad. Son muchas las personas las que se decantan por chimeneas en vez de por la calefacción por la calidez que aporta. Personas que han de tener en cuenta todo lo anterior a la hora de comprar leña en Cantabria.